CLAVEL RANGEL
CIUDAD GUAYANA
Los 15 trabajadores de la Siderúrgica del Orinoco detenidos el lunes, y liberados el martes a la medianoche, contaron que guardias nacionales los trataron como “animales” cuando fueron aprehendidos en las inmediaciones de la fábrica.
“Cuando iba subiendo en mi carro, los guardias me agarraron porque tenía la camisa azul de Sidor. Me bajaron del carro, y eso fue patada y coñazo. Me dieron hasta decir basta, nos trataron como malandros”, relató Rafael Gómez, trabajador de la acería que protestaba por el pago de sus vacaciones en el edificio administrativo de la empresa.
Otros sidoristas, que estuvieron cerca de la manifestación que cerró el paso a Ciudad Guayana el lunes en la mañana, señalaron que fueron detenidos por llevar el uniforme de la empresa.
“Me dijeron bájate, bájate (del carro). Nos trataron como si fuéramos malandros, pero nosotros somos trabajadores, padres de familia y estamos reclamando nuestros derechos porque vivimos en un país democrático. No estamos en una dictadura, creo yo”, dijo Carlos Piedreita, técnico con más de 20 años en la acería, al salir del Palacio de Justicia.
En la asamblea de trabajadores de ayer, los 15 sidoristas contaron que fueron desvestidos en los tribunales con la excusa de que sus uniformes necesitaban ser sometidos a una experticia.
Movilización de trabajadores. Los sindicatos de Guayana anunciaron para hoy la “mamá de las marchas”, que partirá desde los portones de Sidor, Alcasa y Carbonorca y concluirá en la plaza El Hierro de Puerto Ordaz.
La decisión la tomaron en una congregación de sindicatos en el portón III de Sidor, a la que asistieron voceros comunales y en la que anunciaron la participación de dirigentes sindicales de otros estados del país.
El presidente del Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Siderúrgica y Sus Similares, José Luis Hernández, reiteró su mensaje al presidente Nícolás Maduro: “Venga y hable con los trabajadores para resolver el conflicto por la discusión del contrato colectivo”.
El diputado Oswaldo Vera fue declarado “persona non grata” en Sidor por sus declaraciones en el Congreso de Trabajadores el sábado pasado.