Támara Suju Roa
Casi treinta días estuvo en vilo
la atención del mundo democrático por la huelga de hambre que comenzaron y
lideraron Leopoldo López y Daniel Ceballos, a los que se unieron los presos
políticos Raúl Emilio Baduel, Alexander Tirado y Nixon Leal y casi 100 jóvenes
en todo el país liderados por el diputado Julio César Rivas, miembro del
movimiento juvenil Javu. Los huelguistas presos fueron castigados con
aislamiento de sus familiares, se les negó durante toda la huelga ser atendidos
por médicos de su confianza e incluso fuimos testigos del cruel traslado de Daniel
Ceballos a una cárcel en el interior del país, donde fue prácticamente tirado
en una colchoneta sin ningún tipo de asepsia, al lado de una letrina y de un
chorro de agua que le abrían 10 minutos al día.
La huelga conocida por el hashtag
#huelgaxlibertad estuvo en el tapete de las redes sociales, y fue seguida por
usuarios de todo el mundo, solidarios con los venezolanos demócratas que
recurrieron a este tipo de protesta extrema para exigir los derechos
conculcados por el régimen de Nicolás Maduro.
Las peticiones de la huelga
fueron: la libertad de los presos políticos, el cese de la persecución, la
fecha de las próximas elecciones parlamentarias y la observación internacional
de dichas elecciones. Durante éstos días, fueron pronunciándose en todas partes
del mundo, ex presidentes, parlamentarios, personalidades reconocidas
mundialmente, organizaciones internacionales y ONG’S , así como algunos
gobiernos que manifestaron su preocupación por la situación de los presos
políticos y los DDHH en nuestro país.
El secretario general de la OEA,
Luis Almagro, le tomó la palabra a Samper y también escribió en su cuenta
Twitter lo siguiente: “OEA dispuesta a unirse a observación electoral en
Venezuela, si gobierno Nicolás Maduro acepta nuestra participación”.
Inmediatamente después, Christian Leffler, director para las Américas del
Servicio Europeo de Acción Exterior, escribió también en su cuenta Twitter que
la Unión Europea estaba lista para hablar con el CNE sobre las elecciones y ver
junto a la OEA y Unasur cómo podían ayudar.
Llegaron al país el expresidente
español Felipe González, Andrés Pastrana, Jorge Quiroga y una comisión de
parlamentarios brasileños. Todos se fueron insultados y acosados por el
gobierno venezolano, sin poder constatar la situación de los presos políticos,
e incluso a los parlamentarios brasileños le montaron un acto de repudio
subiendo hacia Caracas protagonizado por simpatizantes del régimen, que mostró
el talante antidemocrático y vergonzoso que el gobierno mantiene contra los
demócratas y disidentes de su proyecto de poder.
La iglesia católica venezolana
tuvo un papel fundamental y solidario. El presidente de la Conferencia
Episcopal, Diego Padrón, estuvo visitando a los jóvenes huelguistas y
brindándoles su apoyo, y se trasladó a San Juan de los Morros para ver a Daniel
Ceballos y convencerlo cuando estaba delicado de salud, de cesar la huelga de
hambre. El Cardenal Urosa Sabino también elevó su voz, pidiendo respeto por los
presos políticos y solidarizándose y visitando a los jóvenes que estaban en la
protesta, pidiéndoles no causarse daños físicos irreparables y seguir luchando
por sus ideales, pero vivos y sanos.
La fecha de las elecciones llegó
al final. El 23 de Junio. Arrancada prácticamente de la garganta de la Sra.
Lucena aunque lo nieguen, por la presión. Algo que debía ser normal con un
gobierno que se mienta democrático terminó siendo un ruego, un suplicio para la
oposición democrática. En sus declaraciones reiteró la invitación solo a la
Unasur para avalar el proceso, sin hacer referencia a el ofrecimiento de la OEA
y la UE por estar también presentes. Le toca a Ernesto Samper, tal y como lo
puso en su Twitter, exigirle al gobierno nacional y al CNE que permitan que la
OEA y la UE “cumplan con su tarea” y vengan a observar las elecciones
parlamentarias.
El mismo día 23 fueron liberados
dos estudiantes que estaban recluidos en El Helicoide, Gerardo Resplandor y
Douglas Morillo, quienes ya tenían más de un año presos por manifestar. El día
jueves 25 en horas de la noche, recibió medida humanitaria Andrés León, de 22
años, que sufre de cardiopatía interventricular y se encontraba muy débil.
Estas libertades sólo prueban la arbitrariedad infligida contra estos muchachos
que han pasado meses y meses injustamente detenidos. El esfuerzo, sacrificio y
valentía de los huelguistas, junto con los abogados defensores y la mediación
de la defensoría, ¡había traído la libertad de esta muchachos!
Hoy continúan presos 74
venezolanos por motivos políticos, 2055 personas están siendo procesadas
penalmente con sus libertades restringidas, Leopoldo López, Daniel Ceballos y
Antonio Ledezma, quienes representan y lideran a dos partidos políticos de la
oposición, siguen privados de libertad. Tenemos fechas de elecciones pero no
tenemos observación internacional ni auditoría, y ya empezaron a objetar
algunas postulaciones de candidatos de la oposición, mientras el gobierno sigue
amenazando, inventando conspiraciones e instigando al odio y a la división.
Estimados lectores, los tiranos no dialogan ni quieren mediación, porque esto
significa quedar al desnudo con sus macabras intenciones para permanecer a
cualquier costo en el poder. El camino a transitar en los próximos meses será
duro, intenso, pelando palmo a palmo, con la ventaja para la oposición
democrática de que de que el gobierno se quitó la careta y le mostró al mundo
lo corrupto, malévolo e incompetente que es.