CorreodelCaroni.- Oswaldo Rodríguez, Peter Pérez, Alvin Bridgewater, Sergio Morales y
Carlos Briceño, los cinco jóvenes de Voluntad Popular detenidos el
pasado 5 de julio, contarán con medidas cautelares a partir del lunes,
cuando presenten cada uno dos fiadores con ingresos de 600 unidades
tributarias.Los familiares cuestionan no solo la sentencia, sino el procedimiento
del arresto, sosteniendo la inocencia de cada uno de ellos.
El papá de Oswaldo Rodríguez, cuyo nombre es igual, evalúa
negativamente la decisión tomada por la jueza del Tribunal Primero de
Control, argumentando que el procedimiento para la captura fue
ilegítimo, desconfiando de lo que pueda ocurrir hasta el próximo lunes
tras una decisión que a su juicio está llena de vicios e inducida por la
presión del gobierno.
“Esto es innecesario. Es un costo político para el gobierno, porque
lejos de que los muchachos tengan miedo, nos da más valor porque nos
damos cuenta que no existe el sistema de justicia“, dijo Yureiba Ruiz, madre de Oswaldo, cuando esperaba en tribunales por la audiencia de presentación.
Lo cuentan los padres
El testimonio de los padres de los afectados coincide con lo relatado
por sus compañeros, con respecto a las circunstancias que rodearon la
detención.
La madre de Oswaldo da fe de que su hijo sí salió solo con un coala y
un panfleto de Leopoldo López. “Me dijo que iban a volantear y se llevó
mi carro, que lo iba a guardar en la casa de uno de sus compañeros (Carlos Briceño). Como iban a la panadería, le encargué que si conseguía pan, me comprara”.
Aparentemente, un sujeto dentro de la panadería estaba grabando de
manera sospechosa, por cuanto el dueño llama a la Policía, creyendo que
se trataba de un asaltante.
“Cuando llega la Policía, me dice que el hombre mostró una
identificación y lo soltaron. Fue cuando llegan los motorizados y piden
las identificaciones a los muchachos. Oswaldo discute con ellos,
reclamando la ilegalidad en lo que estaban haciendo, ya que estaban
vestidos de civiles sin ninguna identificación”, agrega Ruiz.
A través de Samuel Petit, Ligia Delfin y Madelaine Fajardo, todos de
Voluntad Popular, se enteran del hecho irregular. Estuvieron
aproximadamente dos horas localizándolo hasta que confirmaron que se
hallaban en la sede del Sebin en San Félix,
donde horas después vio a los otros cuatro jóvenes en recepción
esperando la supuesta entrega de sus cédulas y teléfonos celulares.
El resto de los padres coinciden. De hecho, Rosana Cabrera, madre de
Carlos Briceño, dio fe que en efecto el vehículo de la madre de Oswaldo
había sido guardado en su casa mientras los estudiantes realizarían su
volanteo.
“Los engañaron, les dijeron que les iban a entregar sus cédulas y
teléfonos y los dejaron detenidos (…) ¿dónde están los supuestos
explosivos que les encontraron? Tienen que salir libres porque no han
hecho nada”, asevera Cabrera.
Sobre la segunda aprehensión cometida por el Sebin, el padre de
Sergio Morales, también con el mismo nombre, denuncia precisamente el
engaño del que fueron objeto los estudiantes, acotando que “el abogado
permitió la entrada porque el funcionario del Sebin dijo que iban a
firmar una boleta de entrega. Dieron un voto de confianza”.
Todos aseguran que en ningún momento llegaron a comentarles sobre la
activación de una protesta. “Como padres, los hubiéramos detenidos (…)
esas son órdenes de arriba, nadie sabe del por qué (…) a mi hijo siempre
le he sembrado el ideal de que hay que luchar por la patria”, agrega
Morales.
Juicio viciado
Francis de Bridgewater, madre de Alvin, manifestó su desacuerdo con
la decisión de la jueza que llevó el caso de los cinco estudiantes,
calificándolo como un juicio viciado, tomando en consideración la forma
en cómo se cometió la aprehensión de los cuatro jóvenes que acompañaban a
Rodríguez al momento de la captura, realizada también de manera
irregular.
“La captura es completamente ilegal, fue un procedimiento irregular,
porque no los capturaron in fraganti y los funcionarios no se
identificaron (…) es un hecho completamente político, no se respetó ni
la Constitución ni el COPP (Código Orgánico Procesal Penal)”, puntualizó.
Es de recordar que durante la audiencia de presentación los dos
fiscales del Ministerio Público presentes en la audiencia: Jairo Chacón,
fiscal primero del, y Jaigle Jaime, fiscal de la Sala de Flagrancia no
presentaron cargos contra los universitarios, a excepción de Oswaldo
Rodríguez, a quien se le imputó por detentación de artefactos
incendiarios.
Sin embargo, fue la magistrada quien se atribuyó funciones no
competentes y decidió extender el delito a los cinco dirigentes
juveniles de Voluntad Popular, imponiéndoles una libertad con medidas cautelares
de régimen de presentación cada 15 días, presentar cada uno dos
fiadores con ingresos de 600 UT (Bs.106.200) y estar atentos a cualquier
llamado del tribunal.
Los cinco estudiantes
Sergio Morales: Tiene 19 años y estudia tercer año de Derecho
en la Universidad Gran Mariscal de Ayacucho (UGMA). En las tardes se
dedica a trabajar con su padre, dedicándose en horario completo durante
sus vacaciones. Actualmente cursaba también estudios de inglés. Coordina
Redes Populares de Voluntad Popular en el municipio Caroní.
Oswaldo Rodríguez: 24 años. Estudiante de quinto año de
Derecho de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), donde cuenta con
una beca-trabajo, desempeñando labores en la Escuela de Contaduría.
También cursará el Diplomado de Gobernabilidad, Gerencia Política y
Gestión Pública en la UCAB. Tiene cinco años en Voluntad Popular, siendo
actualmente coordinador de redes populares en la región.
Carlos Briceño: 21 años, estudiante de Economía en la UGMA,
miembro del movimiento estudiantil Ugmista Puerto Ordaz. Es responsable
de Formación de Juventudes de Voluntad Popular en el estado Bolívar,
miembro del partido desde hace año y medio. También iniciaba el viernes
el Diplomado de Gobernabilidad, Gerencia Política y Gestión Pública en
la UCAB-Guayana, el cual inició el 8 de julio.
Peter Pérez: 18 años. Estudiante de quinto semestre de
Comunicación Social en la UCAB. Fundador y dirigente del movimiento
estudiantil Guayana Ucabista. Miembro del equipo juvenil de Voluntad
Popular desde hace dos años, sumándose al equipo a partir de las
primarias de la MUD para las parlamentarias del 6D.
Alvin Bridgewater: 18 años, estudiantes de segundo año de
Economía en la UGMA. Anteriormente había realizado cursos de inglés en
Trinidad y Tobago. A partir de las elecciones parlamentarias del 6D, se
sumó como activista juvenil de Voluntad Popular en el municipio Caroní,
siendo esta su primera participación en el ámbito político.