30 ago 2016

Yajaira Castro: “No se puede negociar la libertad de presos que son inocentes”

Yajaira Castro de Forero dijo que el Gobierno no admitirá que sí hay presos políticos
Erick Lezama Aranguren/El Tiempo

Yajaira Castro de Forero dijo que el Gobierno no admitirá que sí hay presos políticos 
Foto: Wilfredo Yustis
Caracas.- -Luego de la publicación en Gaceta Oficial de la ley que restringe el uso de celulares e Internet en las cárceles y que usted impulsó, la ministra Iris Varela adjudicó esa iniciativa a su gestión, al señalar que la medida se venía implementando desde hace meses en los penales…
 
-La ministra obviamente va a decir que las cárceles de Venezuela son lo mejor que existe en Latinoamérica, no va a admitir que allí hay un foco de corrupción y de delitos. Eso no se ha controlado. Nosotros nos dimos cuenta que desde las prisiones se planifican muchos delitos, como secuestros, y eso, en parte, es consecuencia del uso de celulares. Por eso, desde la Asamblea Nacional (AN) hicimos esta propuesta. ¿Si a los presos políticos apenas les permiten una llamada, que es grabada, por qué los presos comunes pueden tener celulares? Y no sólo eso: además tienen armas, fusiles, granadas. Ahí hay de todo, aunque la ministra quiera negarlo. 

-A propósito de los presos políticos, recientemente le negaron la entrada a una de las sedes del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin). Aseguró que su intención era conversar con Loren Saleh, Gabriel Valles y Juan Miguel Sousa y verificar las condiciones en las que se encuentran. ¿Tiene pensado visitar las cárceles donde se encuentran otros presos políticos?
 
-Desde la Comisión de Política Interior y la subcomisión de Derechos Humanos, la diputada Delsa Solórzano y yo hemos programado una serie de visitas a las cárceles donde se encuentran esos otros presos políticos, que son en total 126. Aunque el Gobierno, con el apoyo del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), ha declarado inconstitucional la Ley de Amnistía, nosotros tenemos que seguir velando porque se respeten los derechos humanos de todos los que están en prisión. Comenzamos por el Sebin de Plaza Venezuela, porque sus familiares han venido denunciando que ellos son torturados: están en unos sótanos a 15 metros de profundidad, con un aire acondicionado que cada vez es más frío, sin ventilación natural. Han presentado enfermedades respiratorias y en los riñones.

-El Gobierno siempre considera fundamental diferenciar entre presos políticos y políticos presos.
 
-Ese es el argumento que llevo años escuchando. A mi esposo, el comisario Lázaro Forero se le hizo un juicio que fue larguísimo, en el que se presentaron pruebas falsas. Nosotros demostramos que era inocente, pero fue condenado a 30 años y está en libertad porque metido ahí en los calabozos le dio cáncer. Casos así son los que se quieren negar. Sí existen presos políticos, como Loren Saleh, como Leopoldo López. Este régimen totalitario no lo va a admitir nunca, porque sabe que si en un gobierno existen presos políticos, no hay libertad ni democracia. 

-De esos 126 casos que usted refiere, hay muchos de los que se conoce poco, que son casi anónimos, contrario a lo que ocurre con los procesos judiciales que enfrentan los presos que forman parte de la dirigencia política. ¿Cuál es el estatus de esas otras causas?
 
-Casi todos tienen el mismo estatus: expedientes fabricados con testigos falsos, con pruebas falsas. Por esto estamos haciendo estas inspecciones. Primero recibimos las denuncias de los familiares en la comisión de Política Interior. En el Helicoide hay enfermedades, no hay luz, no tienen agua, no los sacan a tomar el sol. En el Sebin están hacinados porque los tienen con presos comunes, hay un solo baño para 100 personas. 

-La libertad para los presos políticos ha sido un factor a considerar en las negociaciones para que se produzca el diálogo entre el Gobierno y la oposición. De un lado y del otro hay distintas posturas. Unos defienden la tesis de liberar a algunos presos –o que se les dicten medidas sustitutivas de libertad- a cambio de que el referendo quede en segundo plano. Para otros, en cambio, ese es un punto de honor ¿La postura suya cuál es?
 
-Ni lo uno ni lo otro. La Constitución establece que los derechos no son negociables. El referendo no se negocia, pero la inocencia tampoco. No se puede negociar la libertad de gente que está encarcelada y que es inocente. Si algunos son culpables, que paguen por el delito, ¿pero por qué no se le da celeridad a su proceso? Ahora bien, lo que pasa es que el Gobierno quiere un diálogo para tomarse una foto, para ganar tiempo, para que el Consejo Nacional Electoral –que es su aliado- gane tiempo.
 
Seguridad para policías

Usted está tratando de impulsar la ley que contempla la seguridad social para los policías y la ley del servicio de policías...

-Sí, porque con la paranoia que tiene el Gobierno que va a haber un golpe de Estado ha desarmado a la policía, les ha quitado los helicópteros a las gobernaciones, ha obstaculizado sus funciones. Mientras las calles están sin policías, tenemos muchos funcionarios siendo escoltas de gente del Gobierno. Y queremos mejorar todo eso, garantizar la dotación de unidades, de chalecos antibala.

También proponemos que se eliminen las mal llamadas zonas de paz, que en verdad son zonas de guerra, donde las bandas se han organizado bajo la mirada complaciente del Gobierno. Además, el policía tiene que sentir que está protegido por una ley de seguridad social. Hay policías, que salen todos los días a arriesgar su vida, y no tienen ni seguro de hospitalización, cirugía y maternidad. Esta ley permitirá que los jubilados, pensionados y hasta los que se encuentran estudiando gocen de beneficios a través del Instituto de Seguridad Social del Policía. Y establecemos una pensión de sobreviviente hasta los 25 años, y son discapacitados, sin límite de edad.

-¿Y si -como ocurrió con le Ley del bono de alimentación- el Ejecutivo argumenta que la nación no tiene como sostener esta iniciativa?

-Se ha analizado el impacto económico de estas leyes. Son viables. La seguridad ciudadana no tiene precio, porque es un derecho constitucional. En Venezuela hay dinero para que se aprueben esos beneficios, pero se ha regalado, porque aquí lo que reina es la corrupción. Si el Gobierno lo niega es sólo porque es una propuesta de la oposición. Después de que el Ejecutivo dijo que no tenía como pagar la propuesta de la Ley de Alimentación, regaló a Cuba y a otros países una gran cantidad de dinero, y ahí están nuestros abuelos, decidiendo entre comprar medicinas y comida, pasando trabajo.

-Usted es diputada por el estado Anzoátegui. Desde que fue electa hasta hoy, ¿qué trabajo ha desarrollado allá?

-Mi trabajo ha sido constante. En estos momentos tengo pensado hacer un trabajo allá en materia de seguridad ciudadana.

-¿En qué consistirá ese trabajo?

-No puedo adelantar mucho todavía. Le estoy haciendo seguimiento también a la contaminación ambiental que ha generado el coque. La laguna de Puerto Píritu, por el descuido, está muy contaminada. Esto lo presenté en la Comisión del Ambiente. Se hizo una primera reunión con pobladores de Puerto Píritu y tenemos previsto ir hasta allá, donde haremos una inspección en el sitio. Pero creo que todas las leyes que hemos propuesto van en beneficio de todos los venezolanos, no sólo de una parte, sino de todos.