Se suponía que el martes 4 de julio el Tribunal Supremo de Justicia destituiría a la fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, quien sería remplazada por una vicefiscal designada ilegalmente por el Poder Judicial. No obstante, la destitución no ha ocurrido y se han expuesto las diferencias entre magistrados en torno a esa decisión.
Para ese martes Luis Ortega Díaz fue citada con el fin de iniciar el antejuicio de mérito en su contra. El día anterior el gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles Radonski, había denunciado que la fiscal sería destituida. Esa información la confirmaban varios periodistas. Pero no ocurrió.
El cuatro de julio la fiscal no acudió al Tribunal, por considerar que era un proceso ilegítimo; pero ese día, también, el Poder Judicial designó y juramentó de manera arbitraria a la funcionaria chavista Katherine Harrington como vicefiscal. Y, asimismo, se aplazó la decisión del antejuicio de mérito.
Varios minutos antes la vicefiscal usurpadora, Harrington, intentó entrar a la fuerza a la Fiscalía para sumir su cargo; no obstante, los trabajadores del Ministerio Público se lo impidieron y se tuvo que retirar.
Horas después se confirmó que la reunión de la Sala Plena fue cancelada. La periodista de Univisión y Caracol, Elyangélica González, quien ha seguido de cerca, el caso, lo señaló: “No hubo reunión en Sala Plena, la próxima cita podría ser el lunes, respetando el lapso de 5 días para decidir”.
Pero, además, la periodista publicó en su cuenta de Twitter una información reveladora: “No todos [los magistrados] están de acuerdo”.
González dijo que dentro del Tribunal Supremo de Justicia hay enfrentamientos y diferencias entre magistrados en torno a la decisión de destituir a la fiscal general Luisa Ortega Díaz.
Luisa Ortega Díaz fue, por años, figura clave dentro del chavismo. Y no hay duda de que aún podría mantener vínculos con funcionarios del régimen de Nicolás Maduro. Además, al ser una de las piezas fundamentales del desarrollo del chavismo, es un actor político que podría generar daños importantes a la dictadura.
De hecho, así ha sido. La fiscal general ya ha señalado que los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia son ilegales porque, en el momento de su nombramiento, ella no lo aprobó. En eso ha sido incisiva. Además de que aseguró que la Asamblea Nacional opositora tiene la legitimidad que está ausente en otros Poderes Públicos.
La guerra entre Luisa Ortega Díaz y el régimen de Maduro es abierta. Y, mientras se acerca —o aleja— su posible destitución, ambos bandos gastan todas las municiones con el fin de ejecutar el mayor daño. Siguiendo esto, durante la noche del lunes tres julio el Ministerio Público solicitó al Gobierno de Estados Unidos toda la información referente al caso de los sobrinos de la pareja presidencial que fueron detenidos por transportar cocaína. Aún no se sabe cuál será la siguiente movida de Luisa Ortega Díaz.
Orlando Avendaño vía PanamPostts
